El Comité de las Regiones de la UE (CDR) apoya los planes para brindar a todos los jóvenes europeos una «Garantía Juvenil», que se cofinanciará con los fondos de cohesión europeos. Ahora que Europa cuenta con 5,7 millones de jóvenes desempleados, el Consejo ha solicitado a la Comisión Europea que proponga un paquete de medidas en favor del empleo juvenil que incluya una recomendación sobre el establecimiento de la Garantía Juvenil. Se trata de garantizar que ningún joven de hasta 25 años se quede más de cuatro meses sin trabajo, formación o periodo de prácticas.
Mediante la adopción hoy de esta resolución, el CDR se pronuncia a favor de los ambiciosos planes que hacen de la lucha contra el desempleo juvenil una prioridad de la Estrategia Europa 2020, es decir, la estrategia de crecimiento de la UE, y de la lucha contra la crisis. No obstante, advierte que en la Cumbre de febrero el Consejo Europeo debe alcanzar un acuerdo sobre el presupuesto de la UE para 2014-2020 y que cualquier recorte de los fondos de cohesión impedirá el éxito de este programa. El presidente del CDR, Ramón Luis Valcárcel (PPE/ES), instará ahora a los ministros de la UE a alcanzar rápidamente un acuerdo en cuanto a la recomendación sobre el establecimiento de la Garantía Juvenil antes de febrero y a instaurar este sistema a más tardar en enero de 2014.
La vicepresidenta primera del CDR, Mercedes Bresso (PSE/IT), señaló que «la Garantía Juvenil es una medida decisiva para combatir en toda la UE el desempleo juvenil y sus desastrosas repercusiones, tanto económicas como sociales. Esta garantía ha demostrado su eficacia en varios Estados miembros de la UE, de manera que no hay razón para retrasar su aplicación en toda Europa. El CDR apoya decididamente su establecimiento, convencido de que se trata de un instrumento eficaz para impulsar el empleo juvenil y relanzar el crecimiento». Uno Silberg (EE/AE), Miembro del Consejo Municipal de Kose y presidente del Grupo Alianza Europea, está de acuerdo y añadió que la lucha contra el desempleo juvenil es la primera etapa para afrontar los inaceptables niveles de paro en los Estados miembros. Confía en que la Presidencia irlandesa de la UE alcance lo antes posible un acuerdo al respecto.
Markku Markkula (PPE/FI), concejal de la ciudad de Espoo, acoge con satisfacción la propuesta de Garantía Juvenil de la Comisión Europea, centrada en emprender acciones concretas. Afirmó su deseo de «animar a los entes locales y regionales a aprovechar las nuevas oportunidades más innovadoras para fomentar el empleo juvenil y difundirlas por toda la UE a través del Comité de las Regiones». Markkula añadió que tiene la intención de retomar parte de la resolución sobre la Garantía Juvenil en su dictamen «Cerrar la brecha de la innovación» solicitado por la Presidencia irlandesa de la UE.
El CDR pone también de relieve la necesidad de que las ciudades y regiones participen plenamente en la aplicación del sistema de garantía ya que son las mejor situadas para evaluar los mercados locales de empleo y adaptar los programas a los jóvenes. Por tanto, acoge con satisfacción el enfoque basado en la asociación elegido por la Comisión para aplicar el programa. No obstante, insiste en la importancia de lograr, desde las primeras fases, que participen todas las partes interesadas, incluidos los entes locales y regionales. Pide, además, que los futuros acuerdos de asociación sobre la política de cohesión se centren suficientemente en el desempleo juvenil, en general, y los sistemas de Garantía Juvenil, en particular, acudiendo al Fondo Social Europeo para aplicar buenas prácticas ya existentes en algunos países.
Al contrario que las propuestas originales de la Comisión, el CDR sugiere que los sistemas de Garantía Juvenil se amplíen a los nuevos titulados de hasta 30 años para tener en cuenta las grandes divergencias entre los sistemas educativos según los Estados miembros, que a menudo se organizan y financian a nivel regional. Insiste, además, en la necesidad de completar la Garantía Juvenil con medidas de apoyo que deberían abarcar imperativamente las competencias lingüísticas, así como la experiencia laboral práctica, que mejora la empleabilidad y favorece la movilidad de los jóvenes. A este respecto, el CDR se muestra favorable a la tarjeta profesional europea y al reconocimiento en toda la UE de los períodos de prácticas, retribuidos o no, que forman parte del desarrollo de profesiones reguladas. Dado que los programas de movilidad juvenil no conocen fronteras, el CDR pide a la UE que se fomente mejor la cooperación interregional, prestando especial atención a los Estados miembros que sufren recortes presupuestarios estrictos y a las regiones con especiales características geográficas, como las zonas rurales y escasamente pobladas, y en particular las regiones ultraperiféricas, o las islas.