Ángela y Juana de Villanueva de la Serena han puesto en marcha una empresa para adaptar textos al estándar de Fácil Lectura.
Cualquier texto puede ser adaptado teniendo en cuenta una serie de normas, entre ellas emplear frases cortas y un vocabulario sencillo y directo. Determinados colectivos como los discapacitados intelectuales son usuarios de este recurso.